Un saxofonista comienza a tocar su melodía parado sobre una tarima. Al sentarse y seguir tocando lo hace sobre una silla invisible despertando el asombro de los invitados. Ideal para recepciones, mesas dulces y eventos corporativos.
Un saxofonista comienza a tocar su melodía parado sobre una tarima.
Al sentarse y seguir tocando lo hace sobre una silla invisible despertando el asombro de los invitados.
Ideal para recepciones, mesas dulces y eventos corporativos.